América y Europa: economía joven, economía vieja; economía rapida, economía lenta.
Estoy en los Estados Unidos y la observación en directo de la realidad norteamericana me reafirma en la impresión de que la economía norteamericana es una economía mucho más joven y rápida que la europea.
La profusión de ofertas y la avidez con la que se consume, así como la manera de hacer negocios mucho más práctica y abierta, le dan a esta economía una vitalidad de la que carece la economía europea en general.
Hay tres factores que me parecen especialmente relevantes a la hora de explicar por qué las cosas son así:
1. El consumidor americano es mucho más "agradecido" que el europeo. Consume más y está más abierto a las novedades. En este país cualquiera se pone a vender cualquier cosa en una esquina y en menos de un minuto tiene a alguien parado interesado en lo que vende, y en menos de cinco minutos ya ha vendido algo. Hay una reacción positiva ante la novedad. En Europa esa actitud es más negativa. En general el consumidor es más receloso, y más desconfiado. Introducir un nuevo producto o una nueva oferta, es mucho más arriesgado.
2. Los empresarios tienen mucho menos miedo a fracasar. El fracaso no es un estigma, es un valor. En Europa se condena al fracasado. En los USA se apoya al que lo vuelve a intentar. No hay estigmas. La gente no tiene miedo a probar, porque no tiene miedo a fracasar.
3. Los empresarios de éxito tienen múltiples fórmulas de apoyo que les permiten rentabilizar su éxito y apalancar su crecimiento. Los inversores dispuestos a entrar en nuevas empresas son legión. Vender o comprar en empresas está mucho más generalizado que en Europa. No es tan excepcional como aquí.
En conclusión, tenemos una economía mucho más lenta en Europa. Los USA no son sólo la sociedad del fast food, sino también lo son del FAST BUSINESS.