Poco nos dura la alegría en los mercados financieros actuales. Detrás de una buena noticia llega una retahila de malas noticias, y volvemos a las andadas. Hay que aprovechar los buenos momentos para respirar, pero seguir a cobijo. Tardará mucho en amainar.
El enfermo sigue débil
El enfermo sigue débil
El enfermo sigue débil
Poco nos dura la alegría en los mercados financieros actuales. Detrás de una buena noticia llega una retahila de malas noticias, y volvemos a las andadas. Hay que aprovechar los buenos momentos para respirar, pero seguir a cobijo. Tardará mucho en amainar.