El impacto de los extranjeros en el alza de la vivienda en España
La presión sobre los precios es evidente
Leo un artículo de Judit Montoriol, del Servicio de Estudios de Caixabank (Caixabank Research) titulado El apetito de los extranjeros por comprar una vivienda en España tras la pandemia y me hace pensar que la compra de viviendas por parte de extranjeros es uno de los elementos que explican el alza de precios que está registrando nuestro mercado inmobiliario.
El dato que me lo hace pensar es el porcentaje de ventas que a extranjeros que se ha registrado en 2024: 18,4%.
Aunque las medias son engañosas, porque incluyen las provincias con un mercado inmobiliario más débil (la España rural), donde el porcentaje es obviamente bajísimo, y las dos macro metrópolis del país, donde también es bajo porque en ellas se concentra la población autóctona y la inversión especulativa.
Madrid registra un 10,2% y Barcelona un 16,6% según la autora. Aún así, son porcentajes suficientemente altos como para tirar de los precios en general. Obviamente, ayudados por otros factores, de los que no voy a hablar aquí.
En las provincias turísticas, la presión sobre los precios de los extranjeros es enorme. Juzgad vosotros mismos leyendo los porcentajes registrados de ventas a extranjeros en 2024:
Alicante, 50,9%
Tenerife, Málaga y Baleares, 38%
Girona, 28%
Podríamos decir, malintencionadamente, que poco a poco los extranjeros están echando a los españoles de sus casas, para beneficio de inversores y agentes inmobiliarios…
No es de extrañar que haya un enorme malestar ciudadano, y que de ello se aprovechen ciertas fuerzas políticas.
¿Hay solución?
Estoy implicado por parte doble:
He venido personalmente y acabo de vender nuestro último piso a otro extranjero
Espero no causar un problema irresoluble 😊
Una solución puede venir de poder abordar este problema estructural con políticas que equilibren el acceso a la vivienda para los residentes sin frenar la inversión extranjera beneficiosa. Al fin y al cabo los extranjeros no tienen culpa de tener mayor capacidad económica que la media española, aunque se podrían poner límites a la compra extranjera en las zonas de más presión.
Y para evitar la especulación se podría aumentar los impuestos sobre la compra de viviendas por extranjeros que no residan de forma permanente.
Ahora bien, la otra parte de la solución puede venir de un aumento de la oferta de vivienda asequible a través de incentivos a la construcción de viviendas protegidas en las zonas más afectadas, por ejemplo. Seguro que se podrían encontrar más soluciones.