El valor de lo intangible
El valor de muchas empresas no se encuentra registrado en su contabilidad, y por tanto no lo descubrimos en su balance. El valor de muchas empresas está en elementos intangibles ligados a ella: sus marcas, su acerbo de conocimiento, su capacidad de generar ideas
Algunos de esos activos intangibles están ligados formalmente al ámbito de propiedades o derechos de la sociedad, aunque su valor no esté contabilizado adecuadamente en sus balances. Es el caso de las patentes, o las marcas registradas, o de sus manuales de procedimientos, por ejemplo. Es, lo que podríamos llamar la propiedad intangible.
Otros están ligados a su equipo humano, a la aptitud y actitud de los mismos, que conlleva unas capacidades, una competencias en relación al negocio diferenciadas de sus competidores: gran capacidad de innovación, amplio conocimiento del producto o de los clientes, etc.
Todo ello explica que el valor real de las empresas sea superior a su valor contable. Y también explica porqué unas empresas valen más que otras a pesar de estar ganando lo mismo.
En general hay un potencial escondido en todas las empresas, que se valore en más o en menos según sea la magnitud de sus activos intangibles.
Obviamente, los activos que conforman lo que hemos descrito como propiedad intangible, y que están plasmados en unos derechos (de propiedad intelectual, por ejemplo) son más apreciados que aquellos basados en el valor de los recursos humanos, por naturaleza más volátiles y menos apropiables.
En ese sentido vale más, en términos relativos, Coca-Cola (un modelo de negocio que es 80% marca) que Accenture (80% personas).
Hay indicadores de valor intangibles que conviene seguir si se quiere entender el valor de una empresa:
Satisfacción de los clientes
Nivel educativo del personal
Edad media del personal
Inversión en innovación
Etc.