Totalmente de acuerdo. Uno de los grandes maestros de la comunicación a la hora de presentar un producto fue Steve Jobs. Se preparaba durante días la presentación en varias versiones y finalmente hacía una combinación de las tres.
Aunque Jobs utilizaba diapositivas, la verdadera comunicación la conseguía llevando a su audiencia a través de un viaje que iba desde la descripción de un problema, que el público hacía suyo al punto de convertir a las alternativas competidoras como parte del problema.
Llegados a este punto, el público esperaba de quién tan bien habrá descrito un problema, la solución del mismo. Jobs presentaba esa solución magistralmente al final, con precio y todo. Así presentó el iPhone y otros productos icónicos de Apple.
No era tanto una habilidad nata. Era entrenamiento y un mensaje bien estructurado y emocional.
Totalmente de acuerdo. Uno de los grandes maestros de la comunicación a la hora de presentar un producto fue Steve Jobs. Se preparaba durante días la presentación en varias versiones y finalmente hacía una combinación de las tres.
Aunque Jobs utilizaba diapositivas, la verdadera comunicación la conseguía llevando a su audiencia a través de un viaje que iba desde la descripción de un problema, que el público hacía suyo al punto de convertir a las alternativas competidoras como parte del problema.
Llegados a este punto, el público esperaba de quién tan bien habrá descrito un problema, la solución del mismo. Jobs presentaba esa solución magistralmente al final, con precio y todo. Así presentó el iPhone y otros productos icónicos de Apple.
No era tanto una habilidad nata. Era entrenamiento y un mensaje bien estructurado y emocional.
¡Feliz año 2024!