La automoción, un ejemplo de sector enviciado
Veo a los representantes de las empresas de automoción, concesionarios y fabricantes reclamando más favores de la administración, la recuperación del plan Renove (pago por el coche usado) o la eliminación del impuesto de sociedades, e incluso la reducción del IVA.
¿Creen mis lectores que la solución a largo plazo del sector es esa? Yo creo que no, que sería una cura a corto plazo, pero que el problema de fondo es la incapacidad del consumidor español de cambiarse el vehículo con la frecuencia que lo hacía antes de la crisis, e incluso la tendencia de una parte de las nuevas generaciones a prescindir del automóvil en propiedad, en beneficio de los transportes públicos o los coches alquilados.
Además, me resulta curioso ver quejarse a un sector en el que fabricantes como Volkswagen (propietario de nuestra querida Seat) obtienen beneficios record y suben en la bolsa como la espuma.
El automóvil tiene un mercado diferente y de menor crecimiento en Europa, al menos hasta que introduzca los vehículos eléctricos o basados en otras energías alternativas. Sus mercados de crecimiento están en los países emergentes en los próximos años.
A España le queda asumir un papel global en la industria auxiliar, si puede, al menos en aquellas pocas empresas que sean capaces de asumir dicho reto. En cuanto a los fabricantes, el panorama es muy pesimista, porque no tenemos fabricantes españoles, y nuestros especialistas luchan por mantener centros de I+D+i o plantas de ensamblaje en nuestro terriotorio, pero yo creo que es una batalla perdida.