Los cambios que supone la implantación del Sistema Único de Pagos (SEPA)
El SEPA es una iniciativa europea que pretende homogeneizar en la UE (más Islandia, Noruega, Suiza, Mónaco y Liechtenstein) el tratamiento de transferencias, adeudos domiciliados y tarjetas de pago, de modo que todo pago o cobro por dichos medios sea tratado de igual manera en cualquier país de la UE, y que los bancos no hagan diferencias ni en el procedimiento ni en los costes entre las transaccionales nacionales y las internacionales.
Se ha de poner en marcha como máximo el 1 de febrero de 2014.
El nuevo procedimiento arrastra algunos cambios que conviene conocer y para los que las empresas españolas deben prepararse. Por ejemplo:
- Desaparece el CCC (código de cuenta cliente) para identificar las cuentas bancarias. Se impone el IBAN.
- Los bancos pasan a estar identificados por el BIC (bank international code), un nuevo código internacional.
- Ya no existirán transferencias nacionales y extranjeras. Existirán transferencias SEPA y transferencias no SEPA.
- Seguramente bajarás las comisiones de las operaciones internacionales con la UE y el resto de países SEPA, y aumentarán las comisiones respecto a las cargadas hasta ahora en operaciones nacionales. Pero habrá que verlo.
- Las transferencias SEPA han de recibirse en 1 día hábil.