Porqué se paga una prima de dominio
Cuando se habla de valor de una empresa, hay que tratar de entender todas las cifras que salen a la palestra.
Un elemento del que se habla mucho últimamente es la prima de dominio o de control. Las empresas pagan un 25 a 50% más por una empresa a la que van a pasar a controlar, porque obtienen un porcentaje de capital suficiente para gestionarlas sin oposición. Es algo que estamos viendo todos los días con las OPAs de empresas cotizadas, que se presentan a precios muy superiores a sus precios de cotización anteriores a la OPA, en gran parte debido a que aparece la citada prima.
La prima de dominio se explica principalmente porque permite al comprador definir con libertad la estrategia de la empresa comprada, y ejecutarla sin trabas, al menos internas. En caso de que el comprador sea un competidor, permite incluso ligar la estrategia de la empresa comprada a la de la empresa compradora. De ese modo, el comprador maximiza sus expectativas de valor, que se supone que son superiores a las expectativas de valor que tenía la empresa hasta ese momento.
La tasa de sobreprecio por prima de control que se maneja habitualmente es el 25%, pero no se deje engañar, amigo lector, porque el control no es un valor en sí mismo si no se plasma en mejores perspectivas que las que maneja la empresa comprada hasta ese momento. En ese sentido, la prima de control puede ser inferior o superior al 25%, en la medida que lo sean las perspectivas del comprador respecto a la empresa en caso de que pueda dominarla.