Qué podemos esperar de la economía en 2017
Si la política no aporta mayor incertidumbre y cambios heterodoxos de rumbo, que es algo que podría pasar, ante la oleada de populismo que asola el planeta, 2017 apunta a ser un año tranquilo en el que el crecimiento mundial continuará e incluso aumentará levemente (los analistas vaticinan un 3,2%, algo superior al 3% que se espera para 2016).
¿Qué aportará de nuevo?
Pues principalmente el regreso de la inflación y el cambio de ciclo de los tipos de interés. Eso no quiere decir que se conviertan en un problema, pero sí que empezarán a subir. Se supone que también lo harán los salarios.
¿Y las bolsas? Pues deberían mantenerse sostenidas, si la subida de tipos es lenta y los beneficios empresariales se aguantan bien, como debería ser en Europa y quizás menos en América. Aunque en Estados Unidos la procesión irá por barrios, porque en función de la política que adopte el gobierno norteamericano, habrá sectores y empresas más favorecidos que otros. Esos sí, si se produce un recorte de impuestos de sociedades y se facilita la repatriación de fondos de las grandes multinacionales, la bolsa americana puede experimentar coyunturalmente en cierto boom.
Como siempre habrá que estar atentos.