¿Qué rentabilidad compensa el riesgo que corro con esta inversión?
Los inversores no estamos haciendo continuamente esa pregunta. Y no tiene fácil respuesta.
Es normal que bancos o gestores de proyectos de todo tipo, como promociones inmobiliarias o fondos de capital riesgo o de private equity, o incluso puros especuladores, nos ofrezcan inversiones en las que prometen rentabilidades por encima de las habituales y ya confíen que nos deben resultar atractivas. Pero ¿qué hace que una tasa de rentabilidad prometida sea atractiva? Pues que el plus de rentabilidad frente a una inversión sin riesgo supere el plus de riesgo que el inversor considera que dicha inversión conlleva.
El problema es que ese plus de riesgo es algo completamente subjetivo. Para una persona una inversión conlleva una prima de riesgo del 10% y para otra puede ser del 5%.
Nos viene ayudar en estos casos la comparación con otros instrumentos de inversión similares, por ejemplo.
Yo quiero traer a colación aquí un dato que espero que al menos dé que pensar a mis lectores: La tasa de rentabilidad que los inversores exigen a las obligaciones españolas a 10 años es más de 20 veces la tasa que le exigen a las obligaciones a 1o años alemanas. Las alemanas las compran con el 0,05% de rentabilidad anual, y las españolas con el 1,15% Es un dato sorprendente pero real.
Si usted debe evaluar una propuesta de inversión que le hace alguien y la compara con la rentabilidad de las obligaciones del gobierno de España a 10 años, ¿qué multiplicador le pediría? Piense que si fuera también de x20, nos iríamos a una rentabilidad del 23%