Quo vadis Europa?
¿A dónde va Europa?
Hoy he asistido a una interesante sesión doble. Por la mañana he oido en persona a Rodrigo Rato (ex gerente del FMI y actual presidente de Bankia) y al mediodía a Luis de Guindos (ministro de economía).
La conclusión: ¡hemos perdido el norte! Literalmente, no sabemos a dónde vamos.
Rato ha sido contundente: la solución es LA UNION FISCAL. Parece sensato insistir (y es bueno que lo afirme sin tapujos una persona de su relevancia) en que la Unión Monetaria (el euro) no se sostiene sin avanzar a una unión fiscal.
¡O la Unión Fiscal o el fin del euro!
Y como tras el fin del euro se vislumbra el infierno, el único camino que nos queda (nos guste o no) es la unión fiscal (el purgatorio).
Rato reclamaba una decisión política y un calendario. Según él (y yo coincido) si tuviéramos eso, se calmarían los ánimos y las aguas volverían a su cauce.
En definitiva, ¿por qué está Europa tan mal como está? Porque no tiene una hoja de ruta fiable.
¿La tendremos a corto plazo? Pocos apuestan por ello, y menos viendo la situación en Francia (con Hollande a punto de ganar y de oponerse a cualquier ajuste fiscal, menos a una Unión Fiscal; o con la alternativa de Sarkozy cayendo en manos del Frente Nacional).
Mientras tanto, el dinero que no fluye, y que los analistas y gestores de los grandes fondos mundiales pidiendo cada vez mayores tipos de interés (prima de riesgo por las nubes) para prestar su dinero.