Me permito parafrasear el famoso "¡Es la economía, idiota!" mencionado por un candidato a las elecciones presidenciales norteamericanas (no me acuerdo quien), convirtiéndolo en ¡Son los servicios, idiota!", aunque sin ánimo de ofender a nadie.
¡Son los servicios, idiota!
¡Son los servicios, idiota!
¡Son los servicios, idiota!
Me permito parafrasear el famoso "¡Es la economía, idiota!" mencionado por un candidato a las elecciones presidenciales norteamericanas (no me acuerdo quien), convirtiéndolo en ¡Son los servicios, idiota!", aunque sin ánimo de ofender a nadie.