¿Y después de la crisis qué?
La encuesta que periódicamente realiza la consultora McKinsey a directivos de todo el mundo arroja en septiembre unos resultados que merecen resumirse.
Desde el punto de vista coyuntural es evidente una mejora neta de las expectativas en todo el mundo. Más del 90% de los encuestados dicen creer que las condiciones económicas de su país serán mejores en los siguientes 6 meses.
Otro dato positivo es que el porcentaje de los que esperan aumentar plantillas (26%) ya es el mismo que el de los que esperan reducirlas, mejorando netamente encuestas anteriores.
Las tres prioridades que apuntan en estos momentos son:
Recortar costes
Desarrollar nuevos productos
Hacer las organizaciones más flexibles
Desde el punto de vista más estructural se apuntan unas tendencias muy interesantes:
La creciente consolidación que van a experimentar todos los sectores, que en parte compensará un crecimiento que se estima que será inferior al del pasado.
La innovación en general, que de un modo u otro se plasmará en una redefinición de los esquemas de negocio en muchos sectores.
La total conexión del mundo, comercial, financiera y social.
El continuo reajuste de empleos, cada vez menos en la industria y cada vez más en los servicios. En todo el mundo.