Es un tema apasionante pero complejo. Estudiar buenas prácticas implementadas por algunos países puede servir. Con la fórmula clave: Deuda / PIB, la mejor forma de reducir el ratio no es sólo bajando la Deuda/Gasto, sino aumentando el denominador (PIB). Invertir en partidas que tienen un alto multiplicador fiscal (educación, infraestructuras productivas, I+D, etc). Recortar aquí sería contraproducente porque reduce el crecimiento futuro.
Nosotros hemos crecido en PIB y esto ha ayudado a bajar el ratio de la deuda, pero tenemos un déficit estructural donde gastamos más de lo que ingresamos incluso cuando la economía va bien.
Para gastar menos, en lugar de hacer recortes lineales del tipo “cortar un 10% a todo”, se puede hacer una revisión de los programas y preguntarse: “¿Esto es algo que el gobierno debe hacer, o es algo que puede hacerlo el sector privado o el voluntariado? Y si la respuesta es que el gobierno debe hacerlo preguntarse: “¿Cómo podemos hacerlo de la forma lo más eficiente posible’”.
Hay un gasto importante, como el de las Pensiones donde las vinculamos al IPC para no perder poder adquisitivo. Esto es bueno para los pensionistas pero carga el coste sobre los trabajadores actuales y empresas. Quizás habría que darle una vuelta si se pudieran ajustar automáticamente según la economía y demografía.
En España tengo la sensación que hay diagnósticos brillantes sobre la situación pero falta la ejecución más valiente. Siempre hay que evitar el mayor dolor social. Se podrían eliminar gastos duplicados o ineficientes que ya se han detectado; conseguir un consenso para que las Pensiones no dependan solo de subir impuestos al trabajo y focalizarse más en la productividad de manera obsesiva y en el pleno empleo, que es la mejor forma de pagar el estado del bienestar del futuro.
Ferrán, coincido contigo plenamente. La política fiscal, y sobre todo la Política en mayúsculas exige inteligencia y valentía, y pocos políticos las ejercen, por desgracia. Y, efectivamente, una manera de reducir el ratio Deuda/PIB es hacer crecer el PIB más que la deuda, como está haciendo España estos años.
En cualquier caso, supongo que coincides conmigo en que si tú o yo pudiéramos revisar en profundidad el gasto público español, con apoyo de un gobierno valiente con capacidad legislativa, conseguiríamos ahorrar un porcentaje importante del gasto, localizando duplicidades e ineficiencias, de las cuales el presupuesto público es obvio que está absolutamente infectado.
La economia global tiene sus ciclos.
Tanto la economia real, como su "espejo", la economia financiera.
Actores privados y públicos (estado), se complementan en cuestión de actividad.
1945 fue el top de deuda pública global. 1980 fue el top de inflacion y minina deuda publica.
Desde 1981 hemos tenido un proceso desinflacionario y aumentos de deuda publica hasta 2020! Top bonos global.
Hoy máximos deuda publica, y comienza ciclo inflacionario en 2021!
En cada recesion, rompen los eslabones débiles de la cadena.
Y dicho eslabón débil hoy es Europa.
La guerra Europa con Rusia puede ser el detonante, USA no enviará mas fondos, ... próximos 2 años "pintan mal" para Europa y el "€"
Ciclo largo que "da la vuelta", se pondrá a prueba nuevamente al Euro.
Creación de Bono consolidado de deuda pública de la zona Euro es necesario, si no es así, el Euro estallará. 2027/2028 fractal 1993 y 2011!
Es un tema apasionante pero complejo. Estudiar buenas prácticas implementadas por algunos países puede servir. Con la fórmula clave: Deuda / PIB, la mejor forma de reducir el ratio no es sólo bajando la Deuda/Gasto, sino aumentando el denominador (PIB). Invertir en partidas que tienen un alto multiplicador fiscal (educación, infraestructuras productivas, I+D, etc). Recortar aquí sería contraproducente porque reduce el crecimiento futuro.
Nosotros hemos crecido en PIB y esto ha ayudado a bajar el ratio de la deuda, pero tenemos un déficit estructural donde gastamos más de lo que ingresamos incluso cuando la economía va bien.
Para gastar menos, en lugar de hacer recortes lineales del tipo “cortar un 10% a todo”, se puede hacer una revisión de los programas y preguntarse: “¿Esto es algo que el gobierno debe hacer, o es algo que puede hacerlo el sector privado o el voluntariado? Y si la respuesta es que el gobierno debe hacerlo preguntarse: “¿Cómo podemos hacerlo de la forma lo más eficiente posible’”.
Hay un gasto importante, como el de las Pensiones donde las vinculamos al IPC para no perder poder adquisitivo. Esto es bueno para los pensionistas pero carga el coste sobre los trabajadores actuales y empresas. Quizás habría que darle una vuelta si se pudieran ajustar automáticamente según la economía y demografía.
En España tengo la sensación que hay diagnósticos brillantes sobre la situación pero falta la ejecución más valiente. Siempre hay que evitar el mayor dolor social. Se podrían eliminar gastos duplicados o ineficientes que ya se han detectado; conseguir un consenso para que las Pensiones no dependan solo de subir impuestos al trabajo y focalizarse más en la productividad de manera obsesiva y en el pleno empleo, que es la mejor forma de pagar el estado del bienestar del futuro.
Ferrán, coincido contigo plenamente. La política fiscal, y sobre todo la Política en mayúsculas exige inteligencia y valentía, y pocos políticos las ejercen, por desgracia. Y, efectivamente, una manera de reducir el ratio Deuda/PIB es hacer crecer el PIB más que la deuda, como está haciendo España estos años.
En cualquier caso, supongo que coincides conmigo en que si tú o yo pudiéramos revisar en profundidad el gasto público español, con apoyo de un gobierno valiente con capacidad legislativa, conseguiríamos ahorrar un porcentaje importante del gasto, localizando duplicidades e ineficiencias, de las cuales el presupuesto público es obvio que está absolutamente infectado.