Que la gerente del Fondo Monetario Internacional sea quien lance el mensaje apocalíptico de una depresión económica mundial no parece algo lógico. Porque, además, este tipo de mensajes se convierten a menudo en auto-profecías. Tampoco parece lógico que la bolsa alemana caiga en este lunes negro más que la española. Ni que esto pase en un día en que las bolsas americanas están cerradas por la fiesta de
Lunes negro
Lunes negro
Lunes negro
Que la gerente del Fondo Monetario Internacional sea quien lance el mensaje apocalíptico de una depresión económica mundial no parece algo lógico. Porque, además, este tipo de mensajes se convierten a menudo en auto-profecías. Tampoco parece lógico que la bolsa alemana caiga en este lunes negro más que la española. Ni que esto pase en un día en que las bolsas americanas están cerradas por la fiesta de